Ceremonias y rituales budistas
II. Construcción y destrucción del mandala
"Lo importante no es la obra de arte terminada, sino el proceso de su creación.
El camino es la meta."
Como cuenta el video los mándalas
son diagramas o representaciones esquemáticas y simbólicas del macrocosmos y el
microcosmos, utilizados en el budismo y el hinduismo. En su estructura general representan el
espacio sagrado (el centro del universo y soporte de concentración), y es generalmente, dibujado como un círculo dentro de una forma cuadrangular.
Si bien, la mayoría de las culturas poseen configuraciones mandálicas y
aunque son propios del hinduismo y el budismo, también están presentes en otras
culturas y religiones como el cristianismo. Por lo general el mandala es una figura cuadrada o rectangular,
que contiene un círculo y éste, a su vez, un punto central.

Los mandalas se utilizan como medio de meditación y para honrar
acontecimientos importantes. Su construcción puede tomar varios días o semanas pues el
dibujo, el procesamiento de la arena y la aplicación en el diagrama son muy
dispendiosos. Los monjes comienzan por consagrar el lugar donde
van a realizar el mandala y, durante 30 minutos, realizan cantos y recitan
mantras. Tanto visual como acústicamente llega a ser muy impactante.

Los monjes concluyen la creación del mandala de
arena con su santificación. En algunas ciudades miles de personas han asistido
a la ceremonia de clausura. Es un acto muy colorido.
Una vez el mandala está terminado se inicia el proceso de
destrucción del mismo, el cual sigue un orden determinado que depende del mismo
mándala. Con su destrucción inmediata se simboliza la impermanencia de las
cosas y la naturaleza cambiante de la vida.
Los monjes que construyen y
destruyen el mandala recogen luego la arena utilizada y la llevan hasta un río
en donde la esparcen. Un gran reto par cada uno sería crear un mandala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario